Yo también maté a Franco (romance anarquista) es la historia de Jaime, un mejicano que llega a España durante el régimen franquista, y es acusado y encarcelado por el peor crimen contra el estado: ser comunista. Durante su breve estancia en la cárcel, el protagonista descubre que su infancia en el norte de México no le había permitido darse cuenta de que los procesos políticos de la década de 1960 determinarían el rumbo de sus reflexiones y su existir. Pero, ¿pueden los libros ser peligrosos para quienes los leen? ¿En qué circunstancias el activismo político es considerado un delito? ¿Nuestra sociedad puede cambiar a través de la reflexión teórica o de la praxis? Con algunas reminiscencias de la obra de Max Aub o Francisco Ayala, Luis Ángel Martínez Diez ofrece un romance guerrillero en el que la muerte del dictador es un plan a largo plazo.

El protagonista de este inusual diario de viaje llega a Nueva York para alejarse del caos emocional y profesional en la Ciudad de México, sin saber que su nueva residencia, en uno de los rincones más enigmáticos de la ciudad, China Town, lo llevará a reflexionar y a escribir sobre diversos temas: personas de diferentes nacionalidades, compartiendo un mismo departamento en medio de restaurantes, salones de belleza, tiendas, chinos, chinos y más chinos.

“This book is not an exorcism,” the narrator warns. Nor is it a confessional story or a lamentation. "This book is a declaration of friendship, written on behalf of my demons.” With poignant lucidity, the narrator reflects on the nature of addiction in Mexico at the turn of the century, in which one can already anticipate the social debacle caused by drugs. Among deep reflections on Buddhism, psychoanalysis and philosophy, each chapters is a tribute to Depeche Mode's most emblematic album, Violator. To fully understand it, readers must enter this story ready to open their senses to new experiences.